La queja... Que tema... Cómo te llevas con la queja? Te consideras una mujer quejosa?
Vamos a poner en palabras lo que es la queja para que podamos ponernos en contexto. Cuándo nos estamos quejando?:
- Cuando no estamos conformes con algo de nuestra vida y lo exteriorizamos con: Rezongos, resoplidos, murmullos por lo bajo, cara "fea", mal humor, etc.
- Cuando no somos claras con nosotras mismas y con los demás, lo que hace que nuestro malestar salga por los poros y estemos muy rezongonas culpando a los que nos rodean por nuestra situación.
- Cuando nos sentimos víctimas de la vida y de las circunstancias que estamos viviendo.
- Cuando creemos que no tenemos salida y seguimos haciendo lo mismo de siempre, transformando el mal humor o la queja en parte de nuestro carácter.
- Cuando creemos que "somos así", que el quejarse de todo es parte de nuestra personalidad.
- Cuando "intentamos" no exteriorizar el malestar que tenemos en nuestra alma pero toda nuestra energía y todo nuestro cuerpo, lo dejan muy en claro.
Se te ocurre algún otro ejemplo? La idea es ponernos en contexto y ser lo más sinceras posible con nosotras mismas.
Te cuento que yo era extremadamente quejosa y todavía aún la queja está dentro mío, aunque logro manejarla un poco más que antes, debido a que he tomado acción en implementar algunos cambios que sentía necesario hacer en mi vida... Todavía faltan... Sin embargo, me animé a comenzar aunque no fuera fácil.
Hoy por hoy, siento que me invade como una nube densa y pesada que cubre mis pensamientos y emociones, tiñendo de gris todo lo que acontece. No me deja pensar con claridad y hace que este "reactiva", REACCIONANDO en vez de REFLEXIONANDO.
Será una característica nuestra de las mujeres? El estar quejándonos... El no sentirnos conformes con nada... Si no tenemos hijos, nos quejamos porque no los tenemos y si los tenemos nos quejamos porque los tenemos y no tenemos tiempo para hacer lo que tenemos ganas. Si no tenemos pareja nos quejamos porque estamos solas y si estamos en pareja nos quejamos porque no podemos decidir por nosotras mismas. Si tenemos pelo lacio, nos quejamos porque no es un pelo ondulado y la que lo tiene ondulado se queja porque lo quiere lacio. Si trabajo en dependencia, me quejo de mis compañeros y/o de mi jefe, si soy emprendedora, me quejo del contexto, de la crisis o del país... Y podría poner cientos de ejemplos de estos!!!
Suele suceder, muchas veces, que tenemos tanto ruido y tantas voces dentro nuestro nuestro, que no sabemos que hacer, que acciones tomar o de que manera poder sentirnos mejor. En estos casos donde nos acostumbramos a dejar a los otros contentos y en ese proceso, nos perdimos de nosotras mismas y nos llenamos de voces que nos dicen como tenemos que vivir, que tenemos que decir o como debemos sentirnos.
A veces, creo que también tenemos miedo de tomar decisiones por las consecuencias que puede traer el hacernos cargo de lo REAL que sucede dentro nuestro. A mi me pasa... y a vos?
Creo que si te sentís identificada con lo que te comparto hoy, puede ser que sea una buena señal para que puedas llevarte hacia la introspección... Que puedas conectar con lo que realmente sucede dentro tuyo y con lo que de corazón quieres para ti y para tu vida.
La vida es demasiado hermosa para perdernos en pensamientos que nos hundan o en creencias que nos limiten al disfrute de hacer lo que amamos.
Que la queja nos sirva para un darnos cuenta, para un descubrirnos, para un despertar hacia lo que el corazón clama.
Que es lo que más te aqueja? Que es lo que te repite tu mente y que baja tus energías, que hace que comiences a ver todo gris? Te gustaría compartirlo aquí en los comentarios? así nos acompañamos en este mirarnos real hacia quien somos y hacia quien queremos ser.
Soy Laly Fernández, autora del libro “Me Conozco Luego Emprendo”. Empresaria, contadora, Coach, esposa, madre, mujer inquieta y emprendedora que ama aprender y compartir. Me apasiona el mundo emprendedor y mi propósito es unir el mundo espiritual con el mundo de los negocios, mostrando que es posible ser próspero, consciente y vivir de lo que amamos